9.09.2009


Liverpool

por
José María Millares


Por favor, abridme paso, dejadme cruzar este túnel de

plomo, que quiero ser el

primero en llegar con mi sangre a los muelles de

Liverpool. Amigos, vosotros que os

perfiláis como aletas de

pescado sobre las últimas

esquinas de los bosques; vosotros que de cada rincón

saltáis de una bandeja a

otra como sapos

de azufre ardiendo, como tristes pezuñas de

lagarto, para husmear el rojo

carbón de las calderas, para darle vida al hierro

como al alba le dais su fruto, para darle aliento al agua que se

aleja para siempre de la

tierra, del polvo que tanto

amáis tras unos ojos, decidme que puedo soñar en

vuestros rostros de ceniza y en vuestras sucias calles de

alquitrán, y en vuestros hogares de nata

corrompida, y echar la raíz de mi sangre

como un ancla sobre

vuestras

jurisdicciones marítimas, porque además

de ser hombre como vosotros, soy un

poeta y un poeta es un corazón más sobre la niebla del mundo.